Una vida para amar eso es todo lo que yo pido
Un corazón tan bondadoso que no sea esquivo.
Me acicalo el corazón con las costras del pasado
Me digo a mí mismo cuando todo está en tinieblas
Que fatalmente voy enloqueciendo por tus encantos
Que en forma siniestra me raptas los sentimientos
Te llevas mis suspiros y mis elogios matutinos
Te llevas en tus manos la poesía que te escribo.
Finjo ser un desconocido para tus ojos sinuosos
Y voy tentando al futuro una sonrisa que no veo
Y voy echando por tierra el fuego del infierno mío
Para que se calmen los demonios azuzadores
Que viven en cada cornisa de tus ojos amigables
Y es que yo te amo tanto mi dulce niña adorable.
Un poeta con los versos escarapelados
Un poeta con las melodías escalofriantes
Soy un cuentacuentos que invento rimas
Saco mi pluma y mi imaginación se dispersa
Vuelo por el cielo de las metáforas brillantes
No redundo y distingo entre el placer y el éxtasis
Para ti soy un alienígena de raras costumbres
De corazón manchado y tristezas delirantes
Y mi alma aún no te ha recitado el mejor verso
Que sobre el amor se haya escrito en el universo.
Un poeta, un trovador mítico y misterioso
Un poeta con las entrañas dichosas de escribir
Con la literatura y la floreciente alegría que suele
Crecer en el jardín de mis más íntimos deseos de amor
Lujurioso, abstracto y corrompido es mi pensamiento
Marcado por las huellas de la deshonra humana
Te escribo este poema mientras tú miras a otro lado
Y mi corazón enloquecido suspira de ti enamorado.
martes, 27 de julio de 2010
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